El reencuentro

La gente blanca solo sufre,

Con sus ojos verdes semejantes al pus...de ese que sale en las pepas en la piel ¿saben?

Ellos son su sexo ilícito,

con sus almas selladas en condones, 

con su incapacidad de entregarse fervientes.

Ellos que tienen miedo a la comparación, ellos que son celosos, que no confían 

¿y como confía alguien que pareciera no tuviese sangre ni venas?

Con sus sonrisas carentes de luz en los ojos y sus labios delgados...

sus labios delgados, incapaces de satisfacer a una boca sedienta de pasión.

Ellas con su incapacidad de seducir a un obrero en una construcción,

ellos con su falta de tumbao a la hora de bailar.

Tan derechos, tan cuadros, tan faltos de vida.