La Historia de Ruby Guess

Todo comienza así.

"Un nacimiento no es, en realidad una introducción.
Nuestra vida cuando empieza, no es realmente de nuestra.
Si no la continuación de la vida de otro"

Y así, es exactamente la historia de Ruby.
Su vida, no es exactamente suya.
Tiene muchos fantasmas, ella, es la sucesión de alguien, de alguien, que es de otro.

Naturalmente, una historia debe tener, un inicio, un desarrollo, y un final.

Pero esta es una historia curiosa.
Así como Ruby; Ella, alta, tan delgada, que podría decirse que sufre de algún trastorno, cosa que no es del todo falsa, por lo menos, no con su delgadez, piel oscura, como la arena de la playa que recuerda siempre, del lado amigo de su pueblo natal, un perfil fino, delgado, pestañas risadas y largas, casi tan largas que podría decirse que tocan el inicio de sus cejas, también pobladas, con una forma rectilínea, tan juntas como separadas, que dan paso al inicio de su seno frontal, sus ojos oscuros, tanto como el color, de un buen café hecho por su abuela, en las mañanas; Dando-le así, paso a sus labios, gruesos, carnosos. 

Desde siempre fue una chica muy especial, un tanto curiosa seria la palabra. 
Su infancia no fue la de los niños de las comiquitas ni las películas, alegre, viva, llena de colores. Ella era diferente, le gustaba estar sola, tenia amigos.. si, pero repito, no era normal. 

Veía y sentía cosas, que quizás, ninguna persona a su edad lo hubiese podido notar. Entre risas y sucesos extraños, juegos, y postes, se fue su infancia, quizás fue mas detallada, pero eso ahora no importa.

Su papa y su mama, como la mayoría de los adultos a esa edad, y como la mayoría de los matrimonios, sufrieron dificultades, y para desgracia y/o gracia, estuvo al tanto de todo, o por lo menos la gran mayoría de las cosas que ocurrieron. Puede que eso, la marcara, pero como toda herida, cicatriza, Ruby creció, y esos recuerdos, se llenaron de polvo en un baúl cerrado con una llave, que ella decidió perder, en el hueco mas negro de su sub-consciente. Y de ahí no salio nunca mas, asta claro esta, ella lo creyese prudente. 

Se mudo, de aquel que recuerda como su lugar feliz. Se fue a la Ciudad, un gran cambio, cuando se esta apegado a el lugar que te da seguridad, pero eso no quiere decir, que siempre sea agradable.

 Llegar a un nuevo lugar, mudarse, nueva vida, esas son cosas que para muchos es magnifico; Para Ruby, no es algo cien por ciento seguro, porque ella, aunque siempre dejaba en claro que le gustaba y que no, le costaba mas que adaptarse, sentirse a gusto en cualquier lugar.

Hizo amigos, muy buenos amigos, salia, compartía siempre con ellos, les contaba muchas cosas.

Al fin, Rub, se sentía bien. Mas sin embargo, eso no cambiaba nada, seguía siendo la misma persona gris por dentro, con problemas en el colegio, agresiva, depresiva, yo diría que con pensamientos suicidas, delgada, y adicta al cigarro.

Como toda historia típica, chica delgada, insatisfecha con muchas cosas, con una mente curiosa, y adicta al cigarro. Eso no es todo, como todo cuento, siempre hay un amor, y el de ella, no es común, para muchos, así como ella, no común. 

 Sus emociones y su intelecto estaban bien integrados. Sabia expresar lo que sintiese, y estába dispuesta a ver todas sus experiencias como piezas de un puzzle que poco a poco va formando el «gran cuadro» de su conciencia. De cada estímulo del exterior sabia extraer un significado, y el resultante vasto archivo de información forma la base de su desarrollo y expresión creativos. Poseía una buena memoria, y su capacidad de recordar incidentes del pasado era notable; sin embargo, no dejaba que el pasado distorsionase sus reacciones a acontecimientos actuales, sino que sabia aplicar las lecciones del pasado de forma constructiva en el presente.

Joven, muy joven, descubrió su sexualidad, tuvo novios, no muchos, hasta que en cierto momento, una chica, fue la que llamo su atención.. Y así, muchas chicas mas lo hicieron. Por su parte, ella, con todo lo cerrada que era con sus cosas, declaro su amor por la belleza femenina con su madre, con la única persona que le había dejado ese divorcio, aparte de su hermana, Matilda(Persona a quien Odiaba, pero le debía mucho). Aquella mujer, como todo padre, le costo aceptar aquella curiosa preferencia de su hija, pero que mas remedio le quedaba?, eran los gustos de Rub, no de ella, y mientras menos supiese mejor, y así fue, Ruby no era una chica extrovertida, que hacia de su vida personal un escándalo. 

Ruby tenia muchas virtudes al igual que muchas incapacidades, por que los defectos, siempre son perfectos. Uno de ellos, era su manera de dar amor, y encariñarse con esas que fueron sus chicas, esta claro que con cada ruptura que sufre alguna relación, queda una enseñanza, y un temor, y esto era exactamente lo que le sucedía a Ruby, Se entregaba completamente, Sin recibir nada a cambio, ella vivía y respiraba por aquella que fuere su chica, era detallista y cursi. Típico de mujeres. 

Muchos pensaron que por ser así, es que siempre salia débil de todas sus relaciones fracasadas, ¿Pero que importa lo que piensen los demás?, ella estaba segura que no era así, y siempre aprendía algo nuevo. Y con eso, cuando llegase otra chica, sabría como llevar las cosas.Y así constantemente.

Rub, era una artista, una chica innata, ella nació para dibujar, pintar, y utilizar sus manos como herramientas, siempre que lo necesitase y su cuerpo y mente se lo pidiesen. Por su signo, quizás tenia ciertas cualidades místicas.

Al rededor de los 17 años, después de una serie de estudios, se dieron cuenta de que ella no era del todo normal, ¿Y que importaba eso ya?, así la habían conocido, así la querían, así ella se quería y viviría siempre.

Nadie sabe como terminara su vida, pues su -Frase- no era muy alentadora. Todo siempre estará en veremos..

Lo mas curioso de ella...

Es que no siempre fue una chica y tuvo dos senos.